Cómodos y despues de comer algo, no vienen mal unos mates. Estamos en el Rancho Urbano, ciudad de Buenos Aires, barrio de Almagro, donde nos atienden tan bien y nos sentimos muy cómodos.
Llueve todavía y hace mucho frío. pero debemos acomodar todo
para mañana y poder vender, y regresar con el dinero para cada familia que nos mando sus artesanías.
No hay comentarios:
Publicar un comentario